Peral de agua
El peral de agua (Pyrus Oblonga) es un árbol caducifolio de la familia de las rosáceas, autóctono de la Isla de los lobos.
De tronco fino y erecto, el peral de agua crece de dos a veinte metros. Sus ramas crecen en forma de largos y flexibles tallos, en un ángulo muy cerrado y en vertical. Cada rama es en realidad un pedúnculo en el extremo del cual crecerá un fruto similar a una pera, de gran tamaño, piel gomosa y pulpa carnosa. La fruta no dejará de crecer, haciendo que la rama se doble y tense en forma de arco. Si la fruta cae debido a su peso, explota al rajarse su piel o algo la hace caer, la rama dará un sonoro latigazo, posiblemente provocando el mismo fenómeno en otras ramas del árbol. La pulpa de las peras de agua, gelatinosa, pegajosa y muy dulce —similar a la del melón— atraerá a insectos y pequeños roedores, que quedarán atrapados en ella y fertilizarán el suelo tras su descomposición. Por tanto, el peral de agua podría considerarse una planta carnívora.
(Ilustración pendiente).